El Socio de mi padre romance Capítulo 78

Axel Vega Lazcano

Puerto Vallarta, Jalisco, México

Caminé a la mesa para sentarme y me serví un trago, trataba de no voltear a la pista. Amaia estaba lo que seguía de borracha e Ivanna estaba igual, pero yo era el tonto que las invité y ahora ¿Cómo le haría para llevármelas del evento? Tenía que pensar en algo, si seguía viendo a Amaia hacer esas visiones con Luis Miguel, no me iba a poder controlar y esto se iba a descontrolar.

Afortunadamente después de un rato, ellas volvieron a la mesa, bastante desmejoradas, estaban que se caían de lo borrachas que estaban, mi coraje iba en aumento.

–Güera, ya no van a tomar más – Le dije a mi amiga – Eres una inconsciente, Amaia está enferma y repites lo mismo de la otra vez.

–Yo tomo porque quiero Axel – Dijo Amaia retándome – No le reclames a la güera y, además, esta noche me pienso hundir en el vino. Salud güerita.

–Salud Amaia.

Ambas me ignoraron por completo y eso me llenó de mucho coraje. No dije ya nada, porque Mauricio y Ale, volvieron a la mesa y afortunadamente una hora después, se terminó el evento y todos nos fuimos del lugar. Amaia y la güera, apenas podían sostenerse en pie y todos salimos del salón para subir juntos en el ascensor. Ellas bajaron en el piso de la güera y yo seguí hasta mi suite. Apenas entré llamé a mi amiga, para darle indicaciones.

Esto no me había gustado, la güera, muy bien sabía que Amaia, se podía poner mal y aun así, dejó que se pusiera a tomar como una desesperada. Ya me iban a oír las dos.

–Güera, mete a bañar a Amaia o haz lo que sea posible para que se le baje la borrachera – Le ordené – Tengo una enorme sorpresa para ella, que no puede esperar. Bajo por ella en media hora, apúrate.

Le exigí, estaba demasiado enojado como para tratarla con amabilidad, ella debía cuidar que Amaia estuviera en buenas condiciones, pues sabía que teníamos una salida pendiente.

–Mi amigo Axel, se encuentra de malas, que barbaridad – Se burló ella – Fíjate que sucede que, no te haré caso porque ni por favor, me dices para que haga las cosas. Eres un desgraciado Axel.

–Y tú ¿Qué eres Ivanna? Una cabrona, eso eres. Te mando un vestido y unos zapatos, sin tener obligación de darte nada para que, vayas al evento y te embriagas con Amaia sabiendo que ella y yo, tenemos planes para hoy.

–Sus planes se acabaron. Ella se acostó y está perdidamente dormida. Deja de exigirme que yo, ya me estoy queriendo acostar también y si tanto quieres hacer algo con ella, ven por ella y báñala tú, despiértala tú y ocúpate tú de todo.

–Güera, güera, güera – Moría de coraje cuando me colgó.

Salí de mi suite con todo preparado y fui directo a la suite, de la güera que, ya estaba dormida en el sillón en calidad de bulto. Luis Miguel, me abrió y entré sin permiso a la recámara de Amaia que estaba en la misma situación que la güera. Sin tratar de despertarla, la saqué en brazos de ahí y me fui caminando con ella a la salida del hotel, subimos a un taxi para irnos a dónde yo tenía planeado.

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