Así nada más su estado de "sinceridad" cambió a uno más oscuro, herido por el abrupto rechazo
-Mi error fue no haberme ido antes que todo se fuera a la mierda, fue un buen trabajo pero tú y yo como "jefe / empleada" ni en un millón de años
-Puedo darte un puesto importante, serás reconocida, tu trabajo será distinto, nada de asistente, te lo aseguro
-Ya tengo trabajo
-¿Dónde? ¿En qué?
-Cosa mía Nicholas, no te pongas petulante, sé que eres un hombre importante, ahora un hotelero de súper lujo, pero no voy a volver a trabajar para ti y no insistas
La camarera apareció para rellenar sus copas y cometió el error de volver a tocar la mano de Nicholas, en un nuevo acto de coqueteo, pero esta vez, él, no lo tomó para nada bien
-Retírate ahora mismo, y dile a tu supervisor que quiero hablar con él, no he venido aquí para que una simple empleada se tome licencias para tocarme o coquetearme de ese modo tan vulgar y...-
-¡Basta Nicholas!
Lo detuvo Danielle, levantándose de su silla. Observó a la chica que estaba pálida y humillada al sentirse observada por los clientes de las mesas cercanas.
-Danielle, no te...-
-Silencio -lo fulminó con la mirada-. Karla, por favor indícame cómo llegar a los servicios
-Danielle, no te vayas...
Fulminándolo con la mirada le advirtió que cerrara la boca, siguió a la chica y al encontrarse lejos, le pidió que olvidara el arrebato de Nicholas, explicándole que solo estaba molesto por su conversación y que no tenía nada que ver con ella, la chica se calmó, sus mejillas volvieron a tener color
-Pero como consejo, no vuelvas a hacerlo, intentabas llamar la atención de mi cita frente a mis narices, ten algo de amor propio
-Lo..lo lamento
-Cambia de mesa con uno de tus compañeros
Danielle, se tomó su tiempo para regresar a la mesa, pasó al servicio, le envió un mensaje a Wes, se retocó el maquillaje y entonces regresó a su silla frente a Nicholas, que estaba impaciente y con esa arruga en la frente que indicaba que la paciencia había abandonado su cuerpo
-Quiero recuperarte –soltó nada más verla acercarse
-Vaya, con esa carita solo vas a conseguir espantarme –intentó bromear
-Estoy hablando en serio
-Y yo también, con ese carácter de mierda no vas a conseguir nada de mí
-¿Qué hay de lo que pasó ayer?
-Fue solo sexo
-No, fue más
-Bueno fueron dos veces –bromeó, estaba conteniéndose, lo sabía
-Danielle, me quedé aquí hundido en la mierda componiendo mi vida porque quiero ser mejor para ti, para merecerte
-Entonces no lo hagas sonar como si yo fuera responsable, como si fuese mi obligación ¿cambiaste o sigues siendo el mismo patán de antes?
-¿El mi... PATÁN?
Danielle, asintió y dejó que el nuevo camarero pusiera un maravilloso postre sobre la mesa. Encantada le dio una probada antes de regresar su atención a Nicholas. Pero al levantar la mirada lo encontró sonriendo de oreja a oreja, su ceño ya no estaba fruncido
-Perdóname, sabes que soy temperamental..., hay cosas que no cambian
-Supongo que no –suspira encogiéndose de hombros
-Dios, había extrañado que me pusieras en mi lugar
-Nic...
Y no pudo evitar la carcajada que escapó de su boca, había tenido una buena reacción y eso definitivamente era nuevo. El antiguo Nicholas, se habría levantado furioso y acabado la cita en ese mismo instante
-Sigo queriéndote en mi vida, junto a mí
-¿Qué exactamente quiere decir eso?
-Una relación con todo lo que eso implica, no más secretos, citas, quiero que mis amigos lo sepan, que mi familia te acepte, tus amigos, Jazmín, todo eso
-Creo que paso –soltó concentrada en el postre
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