Mi primera vez (COMPLETA) romance Capítulo 35

—Solo pasé por unas cosas, lo veo normal —se encogió de hombros dejando las bolsas en la mesa. En eso, su vista pasó a mi departamento. Sentí algo de pena porque de seguro no era la gran cosa. Imagino que Mate tendrá una mansión súper grande con muchos empleados. Esto ni siquiera le serviría de closet. —Me gusta tu depa —me dice— Es todo rústico, cómodo y acogedor —sonrió de lado.

—No tienes que fingir —le dejé en claro.

Él me miró con el ceño fruncido.

—Te estoy diciendo la verdad, me gusta.

—Si tú lo dices... —me encogí de hombros. A veces mis "sí tú lo dices" significaba "no te creo".

—Es la verdad. Traje algo de comida rápida, de todo un poco. Hay una pizza familiar, dos hamburguesas con papas, también traje jugos. No sabía qué sabor preferías así que traje de varios —me mostró las botellas de jugo—Traje una bolsa de palomitas y unas cuantas películas para que miremos —tenía tres discos con alguna película.

—¿De qué tratan? —las tomé.

—Bueno, no sabía cuál te gustaría es por eso que traje de tres géneros: romance, terror y acción.

Miré la de romance, no se miraba tan mal, parecía un poco juvenil. La de terror se miraba muy sangrienta y había una de acción. Sin duda prefería la de romance pero no sabía si a Mate le gustaría.

—Adivinaré: prefieres la de terror.

Error.

—De hecho te iba a decir que viéramos la de romance—puse mis labios en una sola línea, quizás a Mate no le gustaban esas cosas de romanticismo.

—Está bien, esa será entonces.

Terminamos de sacar todo y lo dejamos en la mesa.

—¿Qué te quieres comer primero?

—La hamburguesa.

Los dos tomamos una hamburguesa cada uno y nos dirigimos al sofá, dejé mi plato en la mesita del medio y me acerqué al televisor para poner la película. Cuando ya estaba listo volví al sofá y tomé el plato. Mate se había subido las mangas de su camisa hasta los codos y se la había sacado de dentro de su pantalón. Su pelo estaba más o menos despeinado.

—¿Estas seguro de que querías ver esa? —le inquirí, me gustaba que las personas tomaran sus propias decisiones y que las dieran a saber, si no estabas de acuerdo con algo o si no te gustaba algo eras libre de decirlo y yo no te juzgaré, pero no me gusta que las personas dejen de lado lo que quieren solo por quedar bien con alguien más.

—Sí, de verdad que sí. Que sea hombre no significa que no me guste el romance.

—Está bien. Gracias por la comida y todo esto. Normalmente la paso aburrida en mi departamento—le sonreí con sinceridad. Mate se había vuelto un buen amigo conmigo, aunque nos besábamos y todo eso. Recuerdo la vez que me chupó la vagina. Aún sentía pena. La película empezó, y empezó por una pareja teniendo relaciones.

Qué incómodo.

Carraspeé y empecé a comer mi hamburguesa, estaba rica, hace mucho que no comía así. Además de que tenía mucha hambre. Últimamente no había comido a mis horas. Mate y yo mirábamos la película en silencio, cuando nos acabamos las hamburguesas esperamos un poco y después dimos con la pizza.

La película quizás iba a la mitad, me sentía un poco nostálgica viéndola. Al parecer los protagonistas tenían algunos problemas. Creo que he andado sensible estos días, incluso una lágrima solitaria se me escapó rodando por la mejilla. Quizás esté próximo a venir mi periodo.

—No puedo creer que la chica sea tan ciega —murmuré sintiéndome intrigada en la película. Ya nos habíamos acabado la pizza y los dos estábamos sentados casi juntos, casi acurrucados sin darnos cuenta en el sofá.

—Está tomando la decisión correcta.

—¿Por que lo dices?

—Bueno, es cierto que el chico la engañó esa vez. Pero estaba ebrio.

—Aún estando ebrio tu deber es respetar, ¿sabias que el alcohol solo te anima a hacer lo que realmente quieres hacer? Lo que no te atreves a hacer cuando estás en tus cinco sentidos. Es por eso que cuando estás ebrio dices cosas, dices... —me quedé callada al momento en que iba a decir "dices la verdad" y fue como si me lo hubiera dicho a mi misma, anoche cuando Nicky me dijo que me amaba. Creo que debería acatar mis propios consejos.

¿Será cierto? ¿Nicky me ama? "Te amo" era una palabra muy fuerte, no puedes decirla así por así con cualquier novia que tengas. Creo que el "te amo" solo existe una vez, cuando te enamoras de verdad y esa persona permanece contigo. Al menos yo no me veo diciéndole "te amo" a todos los novios que podría tener en el futuro. No cuando sepa que es de verdad, que en verdad tenemos planes a futuro y ese tipo de cosas. Pero a cada novia que tienes le has dicho "te amo" esa palabra ya está gastada cuando sale de tus labios, ya no tiene ningún significado especial.

—¿Qué? —Mate me sacó de mis pensamientos, así que lo miré parpadeando varias veces. Me había quedado como ida pensando en Nicky.

—Nada, miremos la película —volví mi vista a la película. La chica hacía bien en terminarlo por haberle sido infiel mientras estaba ebrio. Ya estaba casi terminando, en el final lloré porque no habían quedado juntos. Pero sabía que era lo mejor. Ella encontraría a alguien especial. Sabía que era solo una película pero me tomaba las cosas muy a pecho.

—No llores —Mate me sobó la espalda. Nos habíamos acabado la comida ya. Me sentía llena pero también me sentía con sueño. Eran pasadas las diez de la noche.

—Estoy bien —me limpié las lágrimas y me puse de pie— Es súper tarde, mañana tengo trabajo.

Mate se puso de pie.

—¿Me estás corriendo? —rió como en forma de broma.

Lo miré asustada.

—¡No! Discúlpame —reí también— no lo dije de esa forma, Mate, discúlpame.

—Tranquila, yo te entiendo —ma dio un abrazo que me tomó por sorpresa— Gracias por hacer de mis días más coloridos, Alis, desde que llegaste todo ha sido mejor. —al separarse inclinó su rostro y me dio un beso. Yo ni siquiera cerré los ojos en el beso, me había tomado por sorpresa. Mate y yo no éramos nada y nos besábamos como si fuéramos algo. No lo entendía. Igual se lo correspondí para que no se sintiera mal.

—Gracias por esto, hacía mucho que no compartía con alguien así. —le sonreí— ¿te veo mañana?

—Claro, quizás vaya a la empresa de Nicky... —murmuró.

—Pero no sé si llegue Nicky mañana —fruncí el ceño, me sentía confundida.

—Llegue o no llegue yo iré. Así te veo —me guiñó un ojo.

—Está bien —asentí— Por allá te veo.

Los dos nos dirigimos a la salida.

—Buenas noches, Alis —me dijo estando en el pasillo.

—Buenas noches, Mate —respondí, cuando Mate se fue yo cerré. Dejé salir el aire que tenía contenido y me dediqué a limpiar un poco el regadero que habíamos dejado. Metí algunos jugos en la nevera y papas de bolsa en la alacena. Me quité la ropa, me puse mi pijama y me cepillé los dientes. Cuando me metí a la cama revisé mis mensajes a ver si tenía alguno, pero para mi tristeza no había nada en el WhatsApp.

Qué desgracia.

Son las consecuencias de no tener una vida sociable. Me metí al chat de Nicky, noté que el estaba en línea. Me pregunto con quien escribirá, de seguro será con alguna chica, con la bruja de Veronica o quien sabe qué. En el fondo tenía ganas de escribirle, solo para preguntarle cómo se encontraba o así. Era raro que Nicky faltara a la empresa, yo lo hacía como una persona que no le gusta ser irresponsable con sus cosas. Pero me imagino que algún motivo tendrá. Me metí a su foto de perfil a verlo, tenía la misma foto como en un yate. Se miraba tan lindo.

Basta, Alis, recuerda que él no es para ti. Ya tuvo su gran amor así que déjalo pasar, deberías de estar mirando la foto de Mate y no de Nicky. Así nunca lo superarás. Me salí del chat de Nicky haciéndole caso a mi conciencia y busqué el chat de Mate.

Ultima vez hoy a las 5:01 PM

Mate ni siquiera se conectaba al WhatsApp, al parecer no tenía tanta conversación con nadie, y eso me gustó. No como Nicky... miré la foto de Mate: ahora salía en alguna casa en la playa, estaba sentado, usaba ropa playera, gafas de sol y tenía una cerveza en su mano. Atrás se veía la playa y el inmenso mar, se veía la puesta de sol también. Mate no era para nada feo.

En eso Mate se conectó, ya decía En línea y a los segundos apareció un Escribiendo... en nuestra conversación.

¡Mierda!

Me salí del chat para que cuando enviara el mensaje no pareciera tan desesperada y esperé. Un, dos, tres, cuatro segundos, hasta que llegó el menaje. Igual, esperé cuatro segundos más para leerlo:

?Buenas noches, Alis, me ha gustado la cita que tuvimos hoy, espero se repita más seguido. Mañana te veo en la empresa.

Besos ?

Sonreí un poco y le respondí:

?Buenas noches, Mate, que descanses. Mañana te veo en la empresa. Y si, podemos hacer más cositas como hoy, eso te lo aseguro. ?

Él lo leyó al segundo, como respuesta mandó un corazón rojo nada más. Y segundos después se desconectó. Me metí a la conversación de Nicky y seguía en línea ¡en línea! ¿Con quien demonios hablará?

NICKY

Daba vueltas en la cama y no podía conciliar el maldito sueño, mi mente pensaba en Alis y en lo que le había dicho la noche anterior. ¿Por qué dije eso? Es decir, Alis hacía algo en mi que... no sabía cómo explicar, jamás me había pasado esto con nadie más. Y cuando digo con nadie es con nadie. Tomé mi celular y me metí al WhatsApp, de inmediato me fui a su chat. No se había conectado, decía Última vez hoy a las 1:00 PM, al parecer no era tanto de las redes sociales. Eso me gustó, hoy en día todas las mujeres se mantenían solo ahí, subiendo fotos, enseñando culos y tetas... nada del otro mundo, la verdad. En estos tiempo me interesaban otras cosas.

Miré su foto, en realidad no tenía foto de perfil lo cual me pareció raro. Quizás Alis no era tanto de las fotos. Aunque me hubiera gustado tener una foto suya, al menos para mirarla de vez en cuando. Hoy la extrañé demasiado en la oficina ¡ni siquiera sé por qué! En ese momento se puso En línea. Mi corazón dio un vuelco en ese momento. Me pregunto con quien escribirá. En mi bandeja de entrada habían muchos mensajes pero ni siquiera me apetecía revisarlos o siquiera responderlos, a menos de que sean asuntos importantes.

Tenía tantas ganas de escribirle, pero no lo haría.

Tenía orgullo.

Alis tenía un carácter fuerte. Además de que en el fondo tenía un poco de temor de que me dejara en visto.

Alis tardó unos minutos en línea pero después se desconectó.

No sé qué me pasaba con ella pero la extrañaba, lo admito.