Mi pretendiente es mi EX-MARIDO romance Capítulo 140

Agustina iba a seguir diciendo algo, Saúl dijo descontentamente, -Ya está, ¿se termina o no? No se puede comer tranquilamente.

Por fin, quedaba silencio totalmente en la mesa.

Después de comer, también se levantó Doria, después de que se marcharon Saúl y Agustina. Iba a volver a su habitación, pero fue detenida por Briana.

Briana estaba a su frente, se rio levemente, -¿Señorita Doria, cómo consideras en lo que te dijo esta mañana?

Doria dijo,-Gracias por la buena intención de señorita Briana. Lo siento mucho por no poder ir contigo.

-¿Lo que se preocupa señorita Doria es la parte del señor Saúl o por la de Aitana? Yo...

-Señorita Briana -Doria dijo levemente-. Casarse es una cosa importante de verdad, hay muchas cosas que preparar. Si voy yo, solo entretengo a señorita Briana.

Briana paró un poco, apareció la cara embarazosa, -Lo siento, no dijo eso a propósito en la mesa aquel momento. Es por...

-Señorita Briana, no tienes que pedir disculpa a mí. No creo que señorita Briana me debas un perdón -dijo la mitad de las palabras, Doria se sentía un poco débil, tampoco sabía cómo explicar, y siguió en voz baja-. Yo sólo quiero descansarme, debo pedirte disculpa por romper el interés de señorita Briana.

Dicho eso, ella asintió con la cabeza hacia Briana y subió arriba.

Vuelta a la habitación, Doria se paró en frente de la ventana por un rato. Se sentó en el lado de la cama y dio un respiro hasta ver el coche negro saliendo lentamente desde la familia Santángel.

No se sabía cuánto tiempo había pasado, ella oyó el ruido de tocar la puerta vagamente.

Doria se recuperó del pensamiento y se levantó andando hacia la puerta.

Ella abrió la puerta y vio que Édgar estaba a la puerta, con las manos metidas en el bolsillo de pantalones. Su expresión era indiferente y su vista estaba mirando al pasillo.

Doria no dijo nada.

Ella casi cerró la puerta sin duda.

El momento antes de cerrar la puerta, Édgar extendió la mano para detenerla y la miró con mucho disgusto.

Doria dijo con paciencia, -¿Gerente Édgar tiene algo que decir?

Édgar volvió a meter su mano en el bolsillo de pantalón, -Te vi que no comías mucho, pido a la cocina que te prepara dos platos de nuevo, te los lleva arriba después.

-Vale, Gracias Gerente Édgar.

Doria iba a cerrar la puerta otra vez mientras dijo

Édgar se fijó en ella allí fríamente.

Édgar dijo, -¿Esta es tu actitud?

Doria torció la boca, - Gracias por la buena intención de Gerente Édgar, voy a comerlos bien.

Ella no estaba llena de verdad, por eso no quería ser cortés con él ahora.

Édgar la estaba mirando fijamente y dijo después de unos segundos, -No te enfades conmigo.

Doria,-¿Qué?

¡Con cuál ojo que él vio que ella estaba enfadada!

Ella respiró profundamente, -Gerente Édgar estás equivocado, sólo me parece que Gerente Édgar va a casarse, no debes aparece a la puerta de la ex-esposa y decir palabras raras como ahora. Se sentirá triste si lo sabe tu prometida.

La cara de Édgar se quedaba igual, -¿Es que te sientes triste o temes que ella se sienta triste?

Doria creía que no podía comunicar con este cabrón.

¡Qué molesto y odioso este cabrón!

La boda ya estaba en el calendario y la prometida también había vivido en casa. Resultó que él quería tener la esposa en casa y tener a otra mujer fuera.

Pero sólo que esta vez, ella era la otra mujer de fuera.

Más pensaba Doria, más angustia tenía. Ella dijo sin paciencia, -¿Qué quieres decir Gerente Édgar? Si no, quiero volver a la habitación a descansarme.

Édgar la miraba sin decir nada.

Doria iba a cerrar la puerta, pero él dijo de repente, -¿Si me caso con Briana realmente, qué vas a hacer?

Doria se quedó callada por unos segundos, -Todo se puede negociar, mientras que Gerente Édgar no me pides el regalo para la boda.

Ella añadió después, -No tengo dinero.

Édgar se rio con frialdad, se volvió marchándose de repente y cerró la puerta fuertemente después de entrar en su habitación.

Doria se paró a la puerta de su habitación como si pudiera sentir la vibración venida desde su lado.

Ella todavía tenía la puerta abierta y ese cabrón cerró la puerta primero.

Doria estaba acostándose en la cama y se sentía molesta y desordenada.

¡Qué pregunta! ¿Acaso ella podía decirle que no se casara? ¿Aunque lo dijera, la escucharía él?

Este cabrón sólo sabía decir las palabras ambiguas todo el tiempo. Una vez que ella pensaba en ese lado, él iba va decirle que ella estaba soñando despierta.

Incluso dijo que ella no comía mucho en la cena. Vaya él realmente podía flirtear con dos mujeres al mismo tiempo. Por un lado estaba hablando con la prometida sobre el día de casarse, por otro lado estaba preocupado por si había comido bien su ex-esposa.

¡Cómo había un cabrón tan abominable como Édgar en este mundo!

***

Pero por otro lado, Israel a lo mejor oyó algún ruido y fue a buscar a Édgar.

La habitación estaba llena de humor de tabaco cuando Édgar abrió la puerta.

Israel entró en la silla de ruedas y dijo riéndose sin remedio, -¿Discutiste con Doria otra vez?

Édgar se sentaba en el sofá echando el agua al cenicero para apagar el cigarro.

Él dijo, -Ella es tan habladora, cómo puedo ganarla en la discusión.

-Doria ha vivido aquí por una semana, aunque ella no dice nada por encima, puedo sentir su soledad. El color de su cara está mejor después de que vienes -Israel dijo-. Pero también tienes culpa, Doria está embarazada, por qué la haces enfadarse siempre.

Édgar apretó un poco la labios finos, -No la fastidio.

Él fue a explicar a ella por el asunto de la boda porque él había visto que Doria estaba bajando la cabeza con la cara mala todo el tiempo desde el comienzo de la cena.

Pero esa mujer sin conciencia fuera como hubiera comido explosivos cuando abrió la puerta, le tenía la actitud tan mala.

Israel volvió a decir, -Sea como sea, la que está en la situación más difícil es Doria. Ella está embarazada de tu bebé, pero vas a casarte con Briana. Vosotros estáis hablando de estas cosas en frente de ella sin tabú. No va estar cómoda cualquier persona.

Édgar dijo después de callarse un rato, -Eso es inevitable para ella.

-Édgar -Israel dijo-. Realmente puedes tener la forma más suave para hablar con ella. No es necesario que uses esta manera tan cruel.

Édgar dijo, -La verdad es cruel. Si la hagan creer que todo es bonito como imagina ella, pues ella nunca va a entender que hay muchas cosas que son mucho peores que la que ella ha experimentado.

Israel dio un respiro sin sonido, -Édgar, te has exagerado. La razón que padre quiere al bebé en la tripa de Doria es porque no quiere que la sangre de la familia Santángel se quede fuera.

Édgar contó su opinión y dijo riéndose, -Él sólo quiere formar otro títere, uno títere que le obedece y es controlado por él. Pero que este títere tiene que llevar la sangre de la familia Santángel.

Una familia grande y rica como la familia Santángel daba mucha importancia a la continuación de sangre. De lo contrario, no hubiera recibido a él, este bastardo, en casa en aquel entonces.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Mi pretendiente es mi EX-MARIDO