Yo, una Actriz Bien Relacionada romance Capítulo 20

Anoche, Julieta ya tenía la corazonada de que Luisa había incendiado su casa a propósito para obligarla a regresar, y ahora parece que fue ella.

Después de tantos años sin verse, Julieta no podía creer que Luisa se hubiera vuelto tan loca como para incendiar una casa.

Seguramente, los métodos poco éticos de Luisa han contribuido al crecimiento actual de la empresa de la familia Mendoza.

Julieta dice: "No voy a permitir que te salgas con la tuya, tampoco me casaré con Martín. Si tanto deseas unirte a la familia Ríos, ¡entonces cásate con Inés!"

Luisa respondió: "Julieta, ¿todavía quieres ser actriz? Si no vienes a la cena de compromiso esta noche, me comunicaré con los medios y contaré todo acerca de tu pasado. Tú nos debes, y si no pagas, te haré la vida muy difícil".

Julieta ya conocía los métodos de Luisa y sabía que esta vez simplemente quería enviar a alguien para secuestrarla y llevarla a la cena de compromiso.

Por eso, Julieta ya tenía un plan: si Luisa venía a buscarla, iría a la antigua casa de la familia Ríos y rompería su compromiso, para volver loca a Luisa.

Al bajar del coche, Julieta aparenta estar mirando su teléfono, pero en realidad está observando su entorno.

Poco después, encontró un vehículo comercial negro con un hombre enmascarado parado al lado, quien la mira fijamente con una expresión extraña.

Julieta finge no notarlo y sigue caminando con la cabeza gacha, mirando su teléfono.

Como esperaba, cuando pasó junto a la camioneta, un grupo de hombres musculosos sale y la sube al vehículo.

Al mirar hacia atrás, ve la cara triunfante de Luisa: "Mi querida hija, ¿crees que puedes superarme solo porque has estado en el extranjero durante unos años? ¿Por qué crees que te he mantenido durante todos estos años, si no es por tu apariencia lucrativa?"

En el momento en que vio a Luisa, Julieta se llenó de alegría. No esperaba que Luisa se presentara tan pronto.

Luisa, completamente ajena al plan de Julieta, le hace una seña a uno de los hombres en el coche.

El hombre cubre la boca y la nariz de Julieta con una toalla empapada en anestésico. Julieta retiene la respiración, finge luchar un poco y luego comienza a fingir que se desmayó.

Luisa, pensando que Julieta realmente se ha desmayado, le dice al hombre que la suelte.

En la villa de la familia Montoya, Bruno está a punto de salir cuando Nacho llega apresuradamente con algo en sus manos: "Sr. Montoya, la invitación de la familia Ríos."

Bruno dijo: "Tíralo"

Después de escuchar esto, Nacho mostró vergüenza: "Sr. Montoya, ¿no sería poco apropiado que no asistieras?"

"Esta mañana, la matriarca llamó específicamente para hablar de esto."

"¿No oíste cuando dije que lo tiraras?" Bruno eleva la voz, claramente molesto.

Nacho no se atrevía a decir nada más y tiró la invitación a la basura.

Como el conductor fue a recoger a Julieta, Bruno tiene que conducir él mismo.

Justo cuando arranca, Nacho corre hacia él con la invitación, gritando: "¡Sr. Montoya, algo terrible ha ocurrido!"

Bruno frunce el ceño: "¿Qué pasó?"

Nacho explica: "Sr. Montoya, el conductor que fue a recoger a Srta. Mendoza acaba de llamar. Dice que fue forzada a entrar en un coche justo después de que él la dejó en la empresa. Siguió a la camioneta y vio que se dirigía al Hotel Dorado. ¡Hoy, el segundo hijo de la familia Ríos tiene su ceremonia de compromiso allí!"

Al escuchar esto, Bruno siente un escalofrío. Inmediatamente arrebató la invitación a Nacho, la desdobló y en ella estaba el nombre de Julieta.

Nacho ni siquiera había terminado de hablar, cuando Bruno ya había pisado el acelerador, el coche salió disparado desde la puerta.

Debido a la velocidad excesiva, incluso derribó el bote de basura que estaba fuera de la puerta.

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