Esposa Pecadora romance Capítulo 792

"Eveline, entendemos que nos tienes resentimiento en tu corazón, pero Jeremy realmente…".

"Si ambos realmente me vieran como su hija, no me detendrían. Lo que Jeremy está recibiendo ahora es la consecuencia de sus acciones. Él no me dio ninguna oportunidad, cuando me arrojó al infierno en aquel entonces, así que lo que sea que estoy haciendo ahora es solo su retribución. ¡Cuanto más miserable sea, más satisfecha estaré!".

Después de decir estas palabras, Madeline sacó su maleta y se fue.

Jeremy miró la figura ya distante, mientras estaba en la entrada de las escaleras en el segundo piso. La luz en sus ojos se extinguió instantáneamente y fue reemplazada por una ola de oscuridad.

Madeline no tuvo más remedio que mudarse a la villa de Felipe.

En esos dos días, todo estuvo estable y Felipe no le hizo nada.

También se enteró de que Felipe iba a dormir a la habitación de Cathy, todas las noches, y solo salía por la tarde, al día siguiente.

Madeline lo encontró un poco extraño. Como tal, entró en la habitación de Cathy y vio la foto de grupo en la mesita de noche.

Ella se sintió realmente molesta. Cathy realmente se había suicidado.

¿Cómo es posible?

Antes de que Cathy se fuera ese día, ella dijo claramente que Felipe había accedido a dejarla salir con el chico que le gustaba. De por sí, ¿no debería haber estado muy feliz?

No, ella no estaba feliz.

Madeline pensó en la expresión de Cathy, el otro día.

Sus ojos estaban rojos. Ella había estado llorando, en secreto.

Madeline tomó la foto y miró a la chica con hoyuelos, sonriendo de manera feliz y dulce. Madeline pensó de repente en algo mientras miraba los ojos sonrientes de Cathy.

"¿Puede ser que la persona que le gustaba a Cathy era Felipe...?".

Justo en el momento en que tuvo esta suposición, sintió que alguien se acercaba detrás de ella.

Madeline se dio la vuelta y vio a Felipe parado, detrás de ella.

"Lo has adivinado bien. Yo le gustaba".

Ella no esperaba que Felipe lo admitiera, tan honestamente. Madeline dejó el marco y dijo: "Resulta que la persona que le gustaba a Cathy eras tú. Su embarazo, en ese entonces... ¿El niño en su vientre te pertenecía?".

Felipe frunció el ceño. Aunque no podía identificar si estaba descontento o no. Madeline lo escuchó responder, fríamente: "¿Y qué si lo era? De todos modos, ya ni el niño ni Cathy existen en este mundo".

Madeline se quedó realmente impactada, cuando recibió tal respuesta, pero lo más inesperado fue que Felipe había dicho esas palabras con una actitud tan indiferente.

"Sí". Madeline sonrió, compadeciéndose de Cathy. "¿Acaso a todos los hijos y nietos de la familia Whitman les gusta lastimar a la persona que más los ama?".

"Era simplemente su ilusión. Ella fue la que tomó la iniciativa de meterse en mi cama. Nunca la obligué".

"Sí, siempre son las mujeres las que somos baratas. ¡Es nuestra culpa que estemos ciegas, haciendo que nos enamoremos de hombres creídos, como todos ustedes!". Madeline se sintió ridiculizada. "Felipe, sigues diciendo que te gusto, pero por otro lado, has defraudado y herido a la persona que realmente te amaba. Esto me demuestra que no me amas. Si realmente me amaras, nunca habrías tratado a Cathy así".

Madeline lo miró con furia, pero cuando pasó junto a Felipe, él la jaló hacia él.

Parecía que le habían tocado su punto más débil, cuando una tormenta furiosa apareció en sus ojos. Luego, estos se enrojecieron. "¿Quién dice que no te amo? Sólo porque te he amado demasiado, me he vuelto tan obsesionado y paranoico, hasta llegar a este punto. Eveline, ¿dices que no te amo? ¡Te demostraré ahora mismo cuánto te amo!".

Mientras decía esto, usó su fuerza bruta para arrojar a Madeline, que había sido sorprendida desprevenida, sobre la cama. Ignorando la resistencia de Madeline, comenzó a inclinarse y presionar su cuerpo contra el de ella.